Competitividad y Productividad

En cada una de las empresas del siglo XXI, han tomado auge dos conceptos importantes para el nacimiento, crecimiento y mantenimiento del liderazgo de una empresa en el mercado que son: competitividad y productividad. Estas dos palabras o conceptos van de la mano, puesto que la productividad es uno de los primeros peldaños que debe alcanzar una empresa para que sea considerada competitiva.

La competitividad por medio de su metodología evaluativa busca medir como se encuentra posicionada una empresa dentro del mercado con respecto a las otras, que tantas fortalezas y debilidades presenta con el fin de tomar correctivos, en el caso de las debilidades, o en su defecto reafirmar las políticas que han logrado crear esas fortalezas empresariales.

Hablando en términos macroeconómicos, se puede decir que la competitividad de una economía, con respecto al resto del mundo, es la capacidad que tiene esta economía para abastecer y suministrar a su mercado interior y exportar bienes y servicios, esto llevado a un concepto empresarial, se entiende que una empresa es competitiva cuando logra por medio de su productividad abastecer y satisfacer las necesidades de su mercado local y al mismo tiempo puede exportar y penetrar en mercados internacionales con grandes índices de posicionamiento; en este punto es donde nos encontramos con la relación entre competitividad y productividad.

La productividad juega un papel muy importante para lograr la competitividad de una empresa, ya que esta nos permite observar la relación que existe entre la cantidad de bienes y servicios producidos y la cantidad de recursos utilizados para la producción, además de ser un método de evaluación del rendimiento del sistema productivo y de los empleados que forman parte de este sistema.

Todo sistema productivo, busca mejorar continuamente todo lo que existe, basados en que cada actividad o proceso que se realice puede ser mejorado a medida que pasan los días, siempre y cuando se realicen esfuerzos para adaptar actividades empresariales, por medio de nuevas teorías y métodos, acorde al mercado cambiante del mundo globalizado.

Para lograr que una empresa alcance niveles de productividad altos y por ende sea considerada competitiva, debe contar con una estimulación por parte de la misma empresa a cada uno de sus trabajadores con el fin que estos se sientan a gusto con lo que hacen, que trabajen a buen ritmo y también es necesario ofrecer la mejor materia prima y las mejores tecnologías para alcanzar eficiencia y eficacia en cada uno de los procesos necesarios para obtener el producto final.

Por lo tanto la competitividad no surge espontáneamente al modificarse los factores de la economía a nivel macro o micro, es el producto de una interacción compleja y dinámica entre el estado, las empresas y las instituciones intermediarias y las capacidad organizativa de la sociedad . La productividad es una actitud de la mente busca mejorar continuamente lo existente y requiere esfuerzos para adaptar actividades económicas a condiciones cambiantes aplicando nuevos métodos y tecnologías .